Trama
Sigue el caótico mundo del abogado penalista Keegan Deane. Brillante, iconoclasta e innatamente autodestructivo, tiene una falta de discreción que le aturde y una incapacidad total para detenerse antes de decir lo que piensa. Desde bígamos hasta caníbales y todo lo demás, los clientes que más quiere Keegan son aquellos cuyos casos parecen no tener remedio, sin que se dé cuenta de que él mismo es quizás el caso más desesperado de todos.