Trama
El mercenario Frank Martin sigue tres reglas estrictas. Una: Nada de nuevos tratos. Dos: Nada de nombres. Tres: No abrir el paquete. Las reglas lo mantienen a salvo y a sus clientes contentos. Cuando se encuentra transportando un paquete que ha empezado a moverse, rompe sus propias reglas abriendo el saco. En su interior encuentra a una joven. Al darse cuenta de que se ha convertido en un participante involuntario en el tráfico de personas, Frank empieza a cuestionar toda su filosofía. Su cliente se entera de la ruptura de las reglas y planea asesinar a Frank, poniendo en peligro tanto al mercenario como a su carga.