007: Alta tensión (1987)

A James Bond le encargan un trabajo que podría cambiar por completo las reglas de la Guerra Fría: asegurar la deserción sin problemas de un general ruso al Reino Unido. Entrega al general sano y salvo, pero descubre que la inteligencia rusa ha puesto en marcha una política de asesinato de agentes enemigos como represalia. Cuando más tarde descubre que la deserción era una farsa, le pone sobre la pista de un traficante de armas secreto y de una transacción que podría alterar drásticamente el equilibrio geopolítico. La misión de Bond le llevará finalmente a Afganistán y más allá en busca de su misterioso objetivo.