Los héroes de Hogan (1965)

Luft Stalag 13 está considerado como uno de los campos de prisioneros de guerra más duros de toda Alemania, aunque está dirigido por un oficial muy inepto en la persona del coronel Wilhelm Klink, que también tiene a su cargo al igualmente inepto sargento Hans Schultz. En más de 100 intentos nunca ha habido una fuga exitosa, pero eso es porque los internos nunca quieren salir. Esto se debe a que el campo está situado en una zona muy estratégica de Alemania y en una base secreta bajo el campo hay una unidad de espionaje y sabotaje muy exitosa que también ayuda a los prisioneros fugados a volver a Inglaterra. La unidad está dirigida por el Coronel del Cuerpo Aéreo del Ejército de los Estados Unidos Robert Hogan y a sus órdenes están el Sargento James Kinchloe, del Ejército de los Estados Unidos, experto en demoliciones, el Sargento Andrew Carter, también del Ejército de los Estados Unidos, el cabo de la RAF Peter Newkirk (experto carterista, ladrón de cajas fuertes y locutor) y el cabo francés Louis LeBeau (cocinero y furtivo). Los únicos que sospechan algo de la operación son el superior de Klink, el general Albert Burkhalter (que siempre amenazaba con enviar a Klink al frente ruso por todos sus deslices) y el mayor de la Gestapo Wolfgang Hochstetter.