El irlandés (2011)

Las tácticas de Gerry Boyle pueden ser poco convencionales, pero funcionan sorprendentemente bien para un policía en una pequeña ciudad. Es ruidoso, conflictivo y no teme ser crudo, pero eso le ha hecho ganarse el cariño de su comunidad. Así que no es de extrañar que no se deje impresionar por el agente del FBI Wendell Everett. Everett está tras la pista de una importante red de contrabando de cocaína, pero Boyle tiene poco interés en abordar un problema que no afecta directamente a su comunidad. Pero a medida que los dos aprenden a trabajar juntos, se unen en su deseo de acabar con los policías corruptos que lideran la fuerza local.