Trama
En 1957, el gran actor británico Sir Laurance Olivier dirige y actúa en una nueva película, El príncipe y la corista. Para interpretar a la protagonista, contrata a la rubia estadounidense Marylin Monroe. Sin embargo, pronto se siente frustrado por la dolorosa falta de confianza en sí misma de la neurótica estrella. Contrata a un joven estudiante de cine de Oxford, Colin Clark, para que actúe como ayudante de Monroe con la esperanza de mejorar su rendimiento. Entre el joven y Monroe surge una relación improbable, ya que comparten tiempo libre y saltan chispas románticas. Ficcionalizada pero basada en hechos reales de la realización de la película clásica de 1957.