Love the Beast (2009)

¿Y si fueras una estrella de cine de Hollywood con una obsesión por los coches y las carreras? Probablemente leerías todos los guiones que tuvieran la más mínima relación con el tema, con la esperanza de poder contar una gran historia de coches del tipo "Grand Prix", "Le Mans" o "Mad Max". Entonces, un día abres por casualidad la puerta de tu garaje y allí, justo delante de ti, está la película que habías estado buscando. Esto es lo que le ocurrió a Eric Bana y, esta vez, el coprotagonista es su propio Ford GT Falcon Coupe: LA BESTIA. Eric se dio cuenta de que la historia era, de hecho, sobre él, su primer coche, una vida de propiedad y una vida de amistad. Se puso a documentar su propia historia de amor de 25 años. Una simple historia de la relación de un hombre con su primer coche. Tras años de preciosa restauración, Eric y sus tres amigos más cercanos decidieron inscribir el coche en una de las carreras de motor más duras y peligrosas que existen: El Rally Targa Tasmania. Esto sería un Everest personal tanto para el hombre como para la máquina, hasta que... en el cuarto día de la carrera, ocurre la tragedia. El hombre que se empeñaba en transmitir lo mucho que él y los que le rodeaban amaban a "LA BESTIA", acababa de destruirla. Eric se ha metido sin quererlo en su propio drama de la vida real. Le seguimos desde el interior del coche de carreras hasta el mundo surrealista de la alfombra roja. Esta convincente historia real sigue la progresión de Eric como amante de los coches, y como persona en conflicto por lo que ha hecho. Las presiones personales y sociales se acumulan ante la necesidad de volver a construir un coche que significa tanto para él. A lo largo del camino, Eric busca la guía y la sabiduría no sólo del santuario de sus tres amigos de toda la vida, sino también de Jay Leno, Jeremy Clarkson y el Dr. Phil.