12 hombres sin piedad (1957)

Ambientada en una sofocante sala de jurados durante toda su duración, 12 Angry Men cuestiona la naturaleza de la justicia, la razón humana y la capacidad de un solo individuo para ejercer el cambio. Tras el juicio de un sospechoso de asesinato de 18 años, 12 jurados se reúnen para decidir su culpabilidad. Si es declarado culpable, será condenado a muerte. Once de los doce ya han tomado una decisión y no desean tener nada más que ver con el juicio. Pero uno de ellos sigue cuestionando la fiabilidad de las pruebas, lo que hace que estallen los ánimos y surjan conflictos al intentar exponer su caso.